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El ex entrenador e integrante del Salón de la Fama del Deportista Sonorense fue reconocido en el Centro Estatal de Gimnasia
Hermosillo, Sonora, 8 de febrero del 2024.- El decano profesor Marcelo Cruz García, miembro del Salón de la Fama del Deportista Sonorense (desde el 2011), y quien es considerado el padre de la gimnasia en la entidad, recibió este jueves un merecido reconocimiento.
En el marco de la ceremonia, en donde fue reinstalada la placa que le da nombre de “Marcelo Cruz García Alvarado”, al Centro Estatal de Alto Rendimiento de Gimnasia (ubicado en la Unidad Deportiva del Noroeste), el homenajeado estuvo acompañado por sus hijos, gimnastas de todas las generaciones, madres y padres de familia.
Además, acudieron varios de sus pupilos, entre ellos Julio César Bécuar Peña, hoy entrenador de gimnasia trampolín e inmortal del deporte en nuestra entidad (Clase 2022), así como Eugenio Madero, director del Salón de la Fama del Deportista Sonorense.
García Alvarado, de 87 años de edad (nació el 16 enero 1937 en Ciudad de México) es un sonorense por adopción, ya que llegó a nuestras tierras en 1963, en donde, a lo largo de varias décadas formó a cientos de deportistas en disciplinas como natación, baloncesto, volibol y beisbol, aunque sus hazañas las escribió dentro de la gimnasia.
Don Marcelo, visiblemente emocionado, agradeció a todas las personas que lo apoyaron en su paso como entrenador, asimismo, se mostró orgulloso de la distinción, mientras recordó los años en los cuales trabajó al servicio de la gimnasia en la entidad.
Con una trayectoria de alrededor de 50 años activo en el deporte (entre atleta y maestro), sobresale su participación como parte del cuerpo de jueces internacionales de gimnasia artística para los Juegos Olímpicos de México 1968, en donde cumplió cabalmente con esa responsabilidad y además colaboró en el Comité Organizador de la cita.
En el cargo de estratega moldeó a decenas de gimnastas sonorenses llevándolos a obtener títulos nacionales y estatales, sobre todo en la década de los setenta, destacando Lupita Peña Porchas, quien, tras una insólita racha de diez cetros a nivel nacional, posteriormente se convirtió en la primera mujer en ingresar al Salón de la Fama del Deportista Sonorense en 1992.